A la hora de elegir materiales para el embalaje, es posible optar por frascos de vidrio escarchado y frascos de vidrio ámbar. Los frascos de apariencia escarchada son muy valorados en cosméticos de alta gama o alimentos exquisitos. Para los consumidores, esto será ventajoso ya que tiene un efecto premonitorio sobre lo que se coloca dentro del producto mientras mejora la sensación táctil. Por otro lado, los frascos de color ámbar tienen una gran demanda para aquellos artículos que requieren protección contra la luz. El oscuro color de los frascos tiene una alta concentración de energía UV, lo que protege cualquier sustancia sensible contenida cerca de la fuente. Las marcas centradas en estos aspectos clave deben conocerlos bien para mejorar el aspecto general de sus botellas y gestionar eficazmente el producto interno.